La artrosis: ¿Qué podemos hacer?

La artrosis se considera la forma más común de artritis. Es una enfermedad de las articulaciones que puede ser muy incapacitante y que afecta a muchas personas en todo el mundo.Actualmente afecta a más de 20 millones de personas en Estados Unidos y se calcula que aumentará a 67 millones en 2030, afectando predominantemente a las mujeres y a las personas mayores.

Algunos de los factores que predisponen a la aparición y progresión de la enfermedad pueden ser:
-Edad
-Género
– Raza o etnia
– Pérdida de estrógenos en la posmenopausia
-Densidad ósea
– Factores nutricionales

También hay factores biomecánicos que provocan el desgaste articular, entre los que se encuentran:

– Obesidad
– Uso repetitivo
– Traumatismo articular agudo o crónico (principal causa de artrosis en jóvenes)
– Debilidad muscular

¿CÓMO PUEDO SABER SI TENGO ARTROSIS?

El diagnóstico se realiza a través de una combinación de signos y síntomas clínicos asociados a una imagen que muestra signos característicos de la enfermedad como los llamados osteofitos.

Algunos de los signos y síntomas que pueden indicar que se padece artrosis son:-

– Dolor articular
– Inflamación
– Rigidez (generalmente por la mañana o tras periodos prolongados de inactividad)
– Limitación del movimiento

También hay otros síntomas que son más específicos de la artrosis de rodilla y de cadera:

Por ejemplo, en la artrosis de rodilla, puede tener inestabilidad en la rodilla, normalmente al subir o bajar escaleras.

Y en la artrosis de cadera, puede notar dificultad para realizar actividades que requieran agacharse, a veces asociada a un dolor en la ingle o las nalgas.

QUÉ PUEDE HACER SI LE DIAGNOSTICAN ARTROSIS?

La estrategia no farmacológica más importante en el tratamiento de la artrosis es el ejercicio.

Múltiples estudios demuestran los efectos beneficiosos del ejercicio físico para el tratamiento y mantenimiento de las personas que padecen esta enfermedad.

Existen pruebas que demuestran la eficacia de los ejercicios de flexibilidad, resistencia y fortalecimiento para el tratamiento del dolor, el aumento de la funcionalidad y la mejora de la calidad de vida.

Uno de los principales objetivos es la reducción del peso corporal en los pacientes obesos, ya que la obesidad es uno de los factores que más predisponen a la aparición de la artrosis. Esto se debe no sólo a la tensión constante sobre las articulaciones de apoyo (rodilla y cadera), sino también a una relación entre las adipoquinas generadas por el tejido graso y la aparición y progresión de la enfermedad.

 

¿QUÉ EJERCICIOS SE PUEDEN HACER?

 

1) EJERCICIOS DE FLEXIBILIDAD: se basa en el estiramiento de los músculos, con el objetivo de mejorar el rango de movimiento y fortalecer las estructuras estabilizadoras de la articulación.

2) EJERCICIOS DE RESISTENCIA: Empieza con ejercicios aeróbicos como caminar, nadar o hacer bicicleta estática.

Si te encuentras en una situación de sobrepeso u obesidad o has sido sedentario durante mucho tiempo, te recomendamos que empieces tu entrenamiento de resistencia y fuerza con programas acuáticos para reducir el impacto en las articulaciones.

Recuerda que esta enfermedad debe ser evaluada y tratada por un grupo de profesionales como: tu médico, un fisioterapeuta y un entrenador personal.

Asegúrese de consultar con su médico antes de iniciar cualquier programa de entrenamiento.

Un buen punto de partida puede ser aumentar la actividad física a diario, notarás una mejora de tu estado físico, lo que te permitirá iniciar un programa de entrenamiento, y mejorar tus habilidades y salud general.